Quizás te suenen las siglas ONGD, aunque te pueda parecer extraña la «D». Sin duda, existe una relación con la denominada organización no gubernamental. Sin embargo, en este caso, llegamos un paso más lejos para centrarnos en los Derechos Humanos. A continuación, te hablamos de la diferencia entre ambos conjuntos de siglas y qué enfoques tienen. Y recuerda que en Inenka puedes estudiar el máster en relaciones internacionales y cooperación para capacitarte en el diseño de planes colaborativos entre naciones.
Índice de contenidos
¿Qué es una ONGD?
Una ONGD responde a una organización no gubernamental para el desarrollo. En lo que se refiere al desarrollo, nos centramos en la solidaridad hacia las personas. A través de las organizaciones que responden a estas siglas, se pretenden defender los derechos individuales, así como de los colectivos más vulnerables.
Puedes encontrarte ONGD procedentes de grupos religiosos, laicos, grupos políticos, sindicatos, etc. Estas organizaciones otorgan ayuda humanitaria, así como servicios asistenciales hasta el punto de suplir la falta gubernamental en donde no actúa.
Diferencia entre ONG y ONGD
Además de esa «D» añadida, existen varias diferencias que debes tener en cuenta. Por un lado, una ONG suele tener muchas áreas de acción, que van desde las humanas hasta las medioambientales.
En el caso de la ONGD, todo lo que mueve a este tipo de organización se limita a ofrecer al ser humano una vida digna. Centrándose en el desarrollo, prioriza al individuo para que, de forma colectiva, se encamine al bienestar. Una de las metas más perseguidas por este tipo de organizaciones es acabar con la pobreza global. A veces, actúan como intermediarios entre los más vulnerables y los poderes gubernamentales.
¿Cómo se financian las ONGD?
Las organizaciones no gubernamentales para el desarrollo son iniciativas privadas. Esto significa que su financiación suele proceder de empresas o entidades no públicas. Del mismo modo, se valen de donaciones, así como de subvenciones estatales o públicas.
En países desarrollados, es normal que veas un reconocimiento gubernamental a estas organizaciones. Estas pueden operar a nivel local, nacional e internacional, en aquellas zonas en donde existe una mayor desigualdad.
Toda ONGD debe atender a los principios de transparencia y ser sometida a auditorías para demostrar su correcto funcionamiento. Así, cuando recibe subvenciones públicas, estas deben aparecer publicadas en los boletines oficiales, al menos dentro de la Unión Europea.
¿Qué tipos de proyectos o actividades realizan?
En cuestiones del desarrollo, estas organizaciones actúan en el marco educativo, económico y social. Su fin es reducir la desigualdad, así que pueden influir en el plano político para defender a los más desfavorecidos.
Otras de sus metas es la solidaridad, así que pueden estar presentes en escenarios catastróficos. Atender a las necesidades individuales y colectivas forma parte de su plan para detener sectores en peligro de pobreza.
También llevan a cabo denuncias de todo tipo, especialmente contra los Derechos Humanos, cuando aprecian que están siendo vulnerados. Los sectores de la tecnología y el comercio también ven su presencia, por cómo influyen en la economía colectiva.
Formarse en cooperación internacional
Como te comentábamos al principio de este post, no dudes en formarte a través de nuestro máster online en relaciones internacionales y cooperación. A través de su programa formativo podrás aprender a diseñar planes colaborativos, conociendo las bases económicas, sociales y culturales te resultará más sencillo comprender las realidades de las distintas sociedades. De esta forma entenderás cómo se mueve una ONGD y el fin de sus proyectos, así como otras entidades sin ánimo de lucro.