Una comunidad de vecinos es una entidad jurídica formada por todos los propietarios de un edificio. De hecho, vivir y compartir espacio con muchas personas no es tarea fácil, ya que muchas veces surgen problemas que pueden evitarse. Por ello, un condominio debe regirse por normas y estatutos acordados. Si te interesa este sector, no dudes en descubrir cómo ser administrador de fincas.
Sigue leyendo este post porque hoy te explicamos los distintos factores que ayudan a gestionar una comunidad de propietarios. También te contamos qué situaciones se deben evitar y algunos consejos para mejorar la convivencia entre vecinos. ¡Síguenos!
Índice de contenidos
¿Cómo funciona la comunidad de vecinos?
Un condominio debe estar organizado para que reine la convivencia. Da igual si es una comunidad de propietarios o un conjunto de locales. Por ello existen leyes y cargos imprescindibles que se encargan de su óptima gestión.
La Ley de Propiedad Horizontal
En España, la Ley de Propiedad Horizontal fue promulgada en los años 60. Es la base de toda gestión de comunidades de vecinos. En ella se establecen las normas de las propiedades o locales. Por ejemplo, se establece los órganos de gobierno de una comunidad de vecinos y sus funciones. También, cuáles son los derechos y deberes de los propietarios o la labor que debe desempeñar un administrador de fincas.
Los órganos de gobierno
En una comunidad de vecinos hay distintas personas que tienen a cargo ciertas responsabilidades. Algunas de ellas puedes ser externas al condominio. Cabe destacar que la duración de sus mandatos es de un año.
Aquí te resumimos los cargos indispensables:
- El Presidente. Es la representación legal de la comunidad. Se encarga de convocar juntas ordinarias y extraordinarias.
- El Vicepresidente. Cargo opcional. En ausencia del presidente, será la persona encargada de sustituirle.
- El Administrador. Lleva los asuntos financieros, legales y técnicos para el mantenimiento y la gestión de la comunidad.
- El Secretario. Sus funciones pueden ser tomadas por el presidente o administrador. Se encarga de expedir los certificados a los propietarios que quieran vender su piso o local. También esta al cargo de expedir los certificados que sean requeridos en las actas posteriores a las juntas de propietarios.
- Junta de propietarios. Es el órgano más importante, ya que está formado por todos los propietarios de una comunidad. En su poder está nombrar un nuevo presidente, aprobar cuentas y presupuestos y admitir o reformar los estatutos.
Los estatutos
A diferencia de la Ley de Propiedad Horizontal, los estatutos son documentos donde se definen los derechos y obligaciones de los propietarios. Por ejemplo, podemos encontrar los usos que se les da a los espacios comunes o las normas a seguir en referencia a los ruidos. Es preciso señalar que no siguen un modelo concreto para su redacción y deben aprobarse en Junta y por unanimidad.
Las juntas
Las juntas son reuniones que convocan la junta de propietarios o el presidente. El objetivo de éstas es defender y velar por los intereses vecinales. Normalmente suelen acudir los titulares de la propiedad y no los inquilinos que están de alquiler.
Cabe destacar que hay dos tipos de juntas. Las ordinarias se celebran mínimo una vez al año. En éstas se aprueban las cuentas del ejercicio que se cierra y el presupuesto del siguiente año. Las extraordinarias puede convocarlas libremente el presidente o el 25% de los propietarios que lo pidan. En ambas, previamente convocadas, se sigue un orden del día y se dan a conocer los propietarios morosos.
Situaciones que generan conflicto entre vecinos
Ruidos a altas horas de la noche, ensuciar zonas comunes, buzones llenos de publicidad… El sentido común y el respeto deben ser un gran aliado a la hora de convivir con nuestros vecinos. Así pues, aquí te mencionamos las típicas situaciones que generan conflicto y que debes evitar a toda costa:
- Hacer ruidos. La música a todo volumen o fiestas en casa que se alargan después de la hora de cenar.
- Obras y reparaciones. Hacer agujeros en la pared a primera hora del domingo o no poner cartones protectores en el ascensor si hacemos obras.
- Animales domésticos. Los ladridos constantes o hacer sus necesidades en las zonas comunes son los típicos casos que provocan conflicto.
- Ropa tendida. La ropa demasiado mojada y que chorree en la casa del vecino. También, colgar la ropa en la terraza, afectando a la estética de la fachada.
- Exceso de plantas en balcones. El agua y humedad por el exceso de riego puede provocar problemas en la estructura del balcón.
- Ensuciar zonas comunes. Manchar el suelo cuando se saca la bolsa de basura goteando. También, lanzar colillas o sacudir las alfombras por el balcón, terraza o patio interior.
- Utilizar las zonas comunes como privadas. Instalar el aire acondicionado en la fachada o estacionar la moto junto a nuestra plaza de aparcamiento.
- Buzones descuidados. La acumulación de correspondencia y publicidad deteriora la imagen del portal.
Consejos para mejorar la convivencia
Si anteriormente te hemos explicado las situaciones que generan más conflicto, ahora te contamos cómo puedes mejorar la convivencia con tu comunidad de vecinos. Da igual si eres nuevo o eres propietario, ser respetuoso y educado te evitará problemas. Así pues, aquí van unos cuantos consejos:
Conoce y preséntate. Aunque parezca raro o lo creas innecesario, conocer a los miembros de la comunidad de vecinos hará que sepan que existes. También es recomendable que te presentes a los vecinos que tengas a los lados.
Respeta los espacios comunes. No es tu responsabilidad limpiar el pasillo o los rellanos, pero tampoco es necesario ensuciarlos con colillas o papeles. Cuida estas áreas como si fuesen tuyas.
Modera los ruidos y los horarios. Puedes organizar fiestas o cenas, pero piensa en la tranquilidad de los vecinos. Tampoco es necesario poner música o la televisión a un volumen elevado. Un vecino exhausto y harto puede alterar la convivencia.
Avisa y dialoga. En referencia al punto anterior, si vas a organizar una cena con tus amigos o tienes que hacer alguna remodelación en casa, es recomendable que avises previamente a tus vecinos más cercanos. Si ya has causado algún problema, háblalo y soluciónalo con calma.
No abuses. Si eres propietario y te han elegido como presidente, no vayas con aires de superioridad. Eres el representante de todos los vecinos y debes preocuparte por la gestión del condominio.
Contribuye con los gastos. A veces, para mejorar algunos aspectos técnicos de la comunidad es necesario hacer derramas. Colabora con los gastos comunes para mejorar el funcionamiento y gestión de la comunidad de vecinos.
El papel del administrador de fincas
El administrador de fincas se encarga de gestionar los asuntos financieros, legales, administrativos y de mantenimiento de una comunidad de vecinos. Ahora bien, sus funciones varían dependiendo de fincas arrendadas o de propiedad.
Para que te hagas una idea, las principales funciones del administrador de fincas arrendadas son:
- Selecciona el arrendatario, constituye la fianza y redacta y firma el contrato.
- Obtiene la cédula de habitabilidad.
- Cobra y actualiza la renta.
- Gestiona el traspaso de locales de tipo comercial.
- Atiende las obras de reparación y mejora.
- Gestiona los morosos.
- Asesora sobre cualquier incidencia en el arrendamiento.
Por otro lado, las funciones del administrador de fincas de propiedad, descritas en el artículo 20 de la Ley de Propiedad Horizontal, son las siguientes:
- Velar por el estado de la casa, sus instalaciones y servicios.
- Preparar un plan de gastos e ingresos.
- Atender la conservación de la casa.
- Ser el secretario de la junta y custodiar documentación.
- Asesorar a la comunidad,
- Llevar la contabilidad
- Advertir sobre morosidad.
- Gestionar la convivencia entre los vecinos de la comunidad.